Sexualidad anal

El coito anal es una práctica sexual consistente en la introducción del pene por el ano y recto de su pareja.El empleo del ano con fines sexuales está considerado una de las prácticas más extendidas en parejas homosexuales, pero también en heterosexuales.Diversos estudios revelan que mujeres y hombres confiesan disfrutar del sexo anal.Donkey punch /'dɒŋki pʌntʃ/ ("puñetazo de burro" en inglés) es un eufemismo que hace referencia a una práctica teórica relacionada con el coito anal, tanto heterosexual como homosexual.El término pegging se refiere a la práctica sexual en la que una mujer penetra analmente a un hombre empleando una prótesis que usualmente va sujeta en el pubis por medio de un arnés de cintura.Este dispositivo se conoce en inglés como strap on (que podría traducirse como ‘con correa’),[11]​ y suele denominarse en español como «estrapón», «cinturonga», o simplemente «consolador con arnés».Son usadas para insertarlas en el recto a través del ano con la ayuda de un lubricante.A menudo se sacan rápida y bruscamente para aumentar la sensación placentera durante el orgasmo.Los que las usan disfrutan cuando las cuentas pasan por el angosto músculo esfínter externo del ano.El ano también es estimulado mediante la boca en una práctica sexual denominada «anilingus», popularmente llamado «beso negro».En esta variante de sexo oral, se realizan desde solo besos con los labios, como lamidas con la lengua.Muchos hombres encuentran sexualmente placentero la estimulación de su próstata, pues para los sexólogos, esa glándula es el punto G masculino.Una variante es la conocida en Estados Unidos como Cleveland Steamer (traducido como «vapor de Cleveland»), y en español como «lluvia negra», en la cual alguien siente placer en defecar a su pareja (o ser defecado) en la cara o pecho.
Ilustración de un coito anal: el glande y parte del resto del pene están introducidos en el ano de su pareja, en este caso, una mujer.
Coito anal homosexual; obra de Édouard-Henri Avril.
Varios modelos de consoladores especialmente diseñados para la penetración anal.
Un arnés con dos consoladores.
Una mujer usando cuentas anales.
Perilla usada para poner enemas anales.
Una mujer practicándole el « anilingus » a otra.
De esta manera se realiza el masaje prostático.