Coprofilia

Consiste en la atracción hacia el oler, saborear, tocar o ver el acto de defecar como un medio de excitación y placer sexuales.

[2]​ La forma en que se presenta la excitación puede variar entre personas, a algunas solo les atrae la sensación que se produce al evacuar, la textura al tacto, ver el acto en otras personas (en vivo o mediante la observación de pornografía), verse a sí mismo, escuchar el sonido al evacuar, olfatear el excremento o untar el excremento mientras se masturban.

[5]​ Varios científicos han comentado que el consumo de heces no afecta[6]​ Además el New England Journal of Medicine publicó una investigación sobre trasplante fecal hacia otro individuo para tratar infecciones bacterianas que ocasionan diarrea.

[6]​ En la Antigua Grecia durante las orgías celebradas se representaba en grabados y dibujos a personas defecando en un cuenco.

White Jordan en 2020 consiguió importar la práctica a Glasgow y hacerla evolucionar uniendo elementos típicos desarrollados en España con los de Escocia.