[3] Para mitigar el efecto de este sesgo se ha propuesto mejorar las prácticas de investigación con la introducción a nivel mundial de: Esto ayudaría a cumplir con las obligaciones éticas hacia los pacientes al permitir la publicación proactiva y revisiones independientes de los datos de ensayos clínicos, y asegurar con ello una base para la decisión plenamente informada en el sistema de salud.
Cuando hay sesgo de publicación, los estudios publicados ya no son una muestra representativa de la evidencia disponible.
Este sesgo distorsiona los resultados de los metanálisis y las revisiones sistemáticas.
Los metanálisis y las revisiones sistemáticas pueden explicar el sesgo de publicación al incluir evidencia de estudios no publicados y literatura gris.
La premisa es que la dispersión de los puntos debe reflejar una forma de embudo, lo que indica que el informe de los tamaños del efecto no está relacionado con su significancia estadística.