Los ejemplos de medicamentos que pueden usarse para la sedación incluyen isoflurano, éter dietílico, propofol, etomidato, ketamina, pentobarbital, lorazepam y midazolam.
Ya que de este modo toleran permanecer con un tubo endotraqueal y estar tranquilos ante un ambiente hostil.
[6] Las complicaciones también podrían incluir perforación, sangrado y la estimulación de los reflejos vasovagales.
[8] Este proceso también puede revelar si el período de sedación necesita ser prolongado o si se requieren procedimientos terapéuticos adicionales.
Además de las precauciones mencionadas anteriormente, se debe entrevistar a los pacientes para determinar si tienen alguna otra afección que pueda provocar complicaciones durante el tratamiento.