[3] Después combatió como ayudante sanitario en la tercera guerra carlista a favor del pretendiente Carlos VII.
En 1876, acabada la guerra, participó en la fundación del diario carlista barcelonés El Correo Catalán.
Se decía que vivía en su mansión con su esposa con las comodidades y el lujo de un aristócrata de gusto depurado, pero al mismo tiempo con la atractiva sencillez catalana.
[13] También escribió piezas teatrales[4] como el juguete cómico Cambis de lluna.
Quan puc acabar la tasca, no estic per córrer borrasca.