Ideado como avión de ataque atierra armado con cañón, resultó un fracaso y solo se construyeron dos ejemplares.
El diseño poseía grandes alas biplanas de dos vanos, con la más larga superior equipada con extensiones arriostradas mediante soportes que podían ser plegadas para el almacenamiento en hangar.
El ala inferior estaba unida al fuselaje a media altura, así que el avión descansaba cerca del suelo.
La intención era poner al artillero en una sección elevada montada sobre las alas, accesible mediante una escalera y un hueco en el ala superior, pero nunca se construyó.
Estos mismos iban a estar montados en el fuselaje, moviendo las hélices propulsoras mediante engranajes y ejes.