Los colores para la bandera son: Es posible considerar que los vexilos (palabra origen del término vexilología) utilizados por los legionarios romanos, durante el dominio de la península ibérica por Roma, fueron las primeras insignias empleadas en la Hispania romana.Los visigodos siguieron utilizando este tipo de estandartes rígidos con alguna clase de paño; pero no fue sino hasta la invasión islámica cuando se comenzaron a utilizar lo que actualmente conocemos como «banderas», ya que el uso de tejidos ligeros en los estandartes, como la seda, tuvo su origen en Oriente, siendo los musulmanes y los cruzados los primeros en implantar su uso en Europa.Se introdujo entonces un elemento común en las banderas españolas de la época: la cruz de Borgoña, que, aunque sufriendo ligeras variaciones con cada rey (como en el caso de Felipe II, quien dispuso que el paño blanco donde se situaba la cruz se cambiara al color amarillo), se convirtió en el símbolo vexilológico por excelencia de España.[8] A fin de dar a conocer la nueva enseña, se promulgó una Ordenanza General, que en el tratado IV, título I, disponía: En 1793 se ordenó que este pabellón, utilizado hasta entonces solo en los buques de guerra con el escudo reducido a dos cuarteles, ondeara también en los puertos y fuertes de la Marina y costas custodiados por el Ejército de Tierra.La bandera rojigualda empezó a utilizarse en campamentos del ejército y fortificaciones fronterizas durante la guerra contra la Convención, aunque al ser una bandera del Ejército el escudo se representa en cuartelado de Castilla y León sobre los colores del pabellón naval.Este diseño rojigualda se conserva hasta nuestros días, aunque ha habido constantes variaciones del escudo.
Reproducción de las banderas elegidas por
Carlos III
en 1785 como pabellones de guerra y civil.
Bandera y pabellón naval de España (1785–1873, 1875–1931).