Es un retablo de estilo clasicista hecho en madera dorada y policromada que empezó el ensamblador Lupercio Getino y terminó otro ensamblador llamado Mateo Flores (de Ponferrada).
En el centro se encuentra la imagen titular, Virgen de la Majestad, románica del siglo XII.
En 1994 tuvo lugar una buena restauración llevada a cabo por Javier Oyamburu.
A ambos lados del banco y bajo las dos calles laterales aparecen los relieves de unos ángeles portadores de cartelas que llevan escritas las indulgencias dadas por el papa Gregorio XIII por ser éste un altar privilegiado.
La que está a la derecha del espectador es Santa Teresa de Jesús, copia del retrato que le hizo fray Juan de la Miseria.
El ático termina en un frontón triangular sobre cuyos lados inclinados reposan las figuras de dos niños o angelotes.