Para poder curarse, las resinas suelen contener grupos terminales reactivos,[2] como acrilatos o epóxidos.
Sin embargo, desde el año 2000, las resinas epoxi y de poliuretano se utilizan también en interiores, principalmente en Europa Occidental.
Otro polímero sintético, a veces denominado con la misma categoría general, es la resina acetal.
[5] Las resinas de silicona son polímeros a base de silicona que presentan diversas propiedades útiles, como resistencia a la intemperie (durabilidad), dielectricidad, repelencia al agua, estabilidad térmica e inercia química.
Los materiales de restauración dental basados en resinas que contienen bis-GMA [7]pueden descomponerse o contaminarse con el compuesto relacionado bisfenol A, un posible alterador endocrino.
Sin embargo, no se han encontrado efectos negativos para la salud del uso de bis-GMA en resinas dentales.