[1] Los sectores asalariados, especialmente delegados y dirigentes sindicales, fueron las principales víctimas de la dictadura.La Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (Conadep) estimó que el 30,2% de los desaparecidos eran obreros; 17,9%, empleados; y 5,7% docentes, mediante un plan sistemático que buscaba disciplinar al movimiento obrero.En 1951 Acindar realizó su primera ampliación, instalando en Villa Constitución la denominada “planta 2”.[4] Acindar y Techint evolucionaron durante el período histórico en que existió un Estado promotor de la industrialización.[4] Esta última empresa también era mayoritariamente propiedad de la familia Acevedo y la US Steel Company, al igual que Acindar.Estas tres corrientes, más los sobrevivientes del GODA, fue el origen de la llamada Lista Marrón.[6] En las elecciones para elegir delegados celebradas en 1973 triunfaron estos sectores, pero las patronales no reconocieron las comisiones electas y en el caso de la empresa Marathón despidieron a los que habían sido elegidos.Ese día se produjeron unas 150 detenciones y 15 asesinatos, y un año después, luego del golpe militar de marzo de 1976, esas cifras llegaron al doble.En esa jornada fue asesinado el obrero de Acindar, José García, diez personas resultaron heridas y otras cien fueron detenidas.Al ser liberados algunos se exiliaron, mientras que otros perdieron sus trabajos sin posibilidad de reemplazarlo debido a las listas negras que circulaban de empresa a empresa.Se sabe que la fábrica Acindar cedió el llamado albergue de solteros a la policía federal para torturar obreros.Todas eran trabajadores y/o dirigentes gremiales metalúrgicos que habían logrado importantes reivindicaciones laborales.