Rendición de Japón

Cuatro años más tarde, Japón y la Unión Soviética suscribieron la Declaración Conjunta Soviético-Japonesa de 1956, poniendo término formal a su estado beligerante.

[13]​ Del resto, solo se sabía que Mitsumasa Yonai, el entonces ministro de la Armada, quería poner fin a la guerra prematuramente.

Según se informó, Roosevelt rechazó inmediatamente el dossier: todas las propuestas incluían la condición de que la posición del emperador fuera asegurada, aunque quizás como títere.

[21]​ En febrero de 1945, el príncipe Fumimaro Konoe le dio al emperador Hiroito un memorándum analizando la situación, y le dijo a Hirohito que, si la guerra continuaba, la casa Imperial podría estar en mayor peligro por una revolución interna que por una derrota en la guerra.

[34]​ Kido propuso que el propio emperador entrara en acción ofreciendo un final para la guerra en "términos muy generosos".

Recibió además un informe del príncipe Higashikuni, y tras su lectura concluyó que "ya no era sólo la defensa de la costa; las divisiones reservadas para participar en la batalla decisiva tampoco tenían armamento suficiente".

Satō debía discutir el estatus de Manchuria y "cualquier asunto que los rusos quisieran plantear".

[42]​En respuesta, Satō aclaró: No hace falta decir que, en mi anterior mensaje pidiendo una rendición incondicional o términos muy parecidos, hice una excepción sobre la cuestión de preservar [la Casa Imperial].

[46]​ El más importante de estos intereses era conseguir un acceso sin restricciones al océano Pacífico.

Su objetivo principal era conquistar estos territorios, garantizando así el libre acceso al estrecho de Soya.

[49]​ Con este objeto, Stalin y Molotov prolongaron las negociaciones con los japoneses, dándoles falsas esperanzas de una paz mediada por los soviéticos.

[50]​ Al mismo tiempo, en sus negociaciones con Estados Unidos y Gran Bretaña, los soviéticos insistían en su estricta adhesión a la Declaración de El Cairo, reafirmada en la Conferencia de Yalta, que suponía que los Aliados no aceptarían una paz condicional o separada con Japón.

Los gobiernos estadounidense y británico discrepaban mucho sobre este punto: los estadounidenses querían abolir el cargo y posiblemente procesarlo como criminal de guerra, mientras que los británicos querían que se conservara el cargo, quizás con Hirohito.

En un telegrama, Shunichi Kase, el embajador de Japón en Suiza, observó que la rendición incondicional solo se aplicaba al ejército y no al gobierno o al pueblo, y alegó que debía entenderse que el prudente lenguaje de Potsdam parecía "haber ocasionado mucha reflexión" en los gobiernos firmantes; "parecen haber puesto mucho esmero en salvar la cara ante nosotros en muchos puntos".

[63]​ Sin embargo, la declaración de Suzuki, especialmente la última frase, dejaba poco espacio para una interpretación equivocada y la prensa lo tomó como un rechazo, tanto en Japón como en el extranjero, y no se hizo ninguna otra declaración en público o mediante canales diplomáticos para cambiar esta interpretación.

Más tarde, ese mismo día, recibieron una transmisión del presidente estadounidense Truman anunciando la primera utilización de una bomba atómica, y prometiendo Ahora estamos preparados para arrasar más rápida y completamente cualquier empresa que tengan los japoneses sobre el suelo en cualquier ciudad.

Si ahora no aceptan nuestros términos, que esperen del cielo una lluvia de perdición, una como jamás se ha visto en esta tierra.

[67]​ El almirante Soemu Toyoda, jefe del Estado Mayor Naval, afirmó que aunque los estadounidenses hubieran hecho una bomba, no podían tener muchas más.

[72]​ Hirohito le dijo a Kido que debía "controlar rápidamente la situación" porque "la Unión Soviética nos ha declarado la guerra y hoy han iniciado hostilidades contra nosotros".

"[81]​ Cuando se marchó el emperador, Suzuki presionó al gabinete para que aceptara la voluntad del este, y así lo hizo.

Como comandante del Segundo Ejército, cuyo cuartel general se encontraba en Hiroshima antes de ser destruida, Hata comandaba todas las tropas que defendían el sur de Japón: las tropas que se preparaban para luchar en la "batalla decisiva".

[96]​ En una conferencia con el gabinete y otros consejeros, Anami, Toyoda y Umezu volvieron a insistir en continuar con la lucha, tras lo cual el emperador dijo: He escuchado detenidamente todos los argumentos presentados en oposición a la opinión de que Japón debería aceptar la respuesta de los aliados tal y como está y sin mayor clarificación o modificación, pero mis pensamientos no han sufrido ningún cambio[...] Para que el pueblo pueda conocer mi decisión, os pido que preparéis de inmediato un rescripto imperial para que pueda retransmitirlo a la nación.

Tras haber colocado todas las piezas, Hatanaka y sus compañeros conspiradores decidieron que la Guardia tomaría el palacio a las 02:00.

Las horas anteriores las ocuparían en seguir intentando convencer a sus superiores del ejército para que se unieran al golpe.

[106]​ No queda claro si por «crimen» se refería a perder la guerra o al golpe de Estado.

[112]​[113]​ Durante su búsqueda, los rebeldes cortaron casi todas las líneas telefónicas, interrumpiendo las comunicaciones entre los prisioneros que tenían en palacio y el mundo exterior.

Cuando la hallaron vacía, acribillaron la oficina con una ametralladora, incendiaron el edificio y luego se marcharon al domicilio de Suzuki.

Hisatsune Sakomizu avisó a Suzuki y este escapó unos minutos antes de que llegaran los rebeldes.

Suzuki estuvo el resto del mes de agosto bajo protección policial, pasando la noche en una cama distinta cada vez.

Alfred Eisenstaedt hizo la famosa fotografía de un marinero estadounidense besando a una mujer en Times Square.

El ministro de exteriores japonés Mamoru Shigemitsu firma el Acta de Rendición de Japón a bordo del USS Missouri , mientras el general Richard K. Sutherland observa, 2 de septiembre de 1945.
Desembarcos aliados durante las operaciones del Teatro del Pacífico, agosto de 1942 a agosto de 1945.
El crucero de batalla reconstruido Haruna fue hundido en su amarre de la base naval de Kure el 24 de julio, durante una serie de bombardeos .
El gabinete de Suzuki en junio de 1945.
Como primer ministro, el almirante Kantarō Suzuki lideró el gobierno japonés en los meses finales de la guerra.
Ministro de Exteriores Shigenori Tōgō.
Bomba atómica sobre Nagasaki .
Ministro de la guerra Korechika Anami.
Un folleto arrojado sobre Japón tras el bombardeo de Hiroshima. El folleto dice, en parte: El pueblo japonés se enfrenta a un otoño extremadamente importante. Nuestra alianza de tres países le presentó a vuestros líderes trece artículos de rendición para ponerle fin a esta guerra infructuosa. Esta propuesta fue ignorada por los líderes de vuestro ejército[...] Estados Unidos ha desarrollado una bomba atómica, algo que no ha hecho ninguna otra nación con anterioridad. Se ha determinado utilizar esta terrorífica bomba. Una bomba atómica tiene el poder destructivo de 2.000 B-29 .
Kenji Hatanaka , líder del golpe de Estado.
El golpe fracasó después de que Shizuichi Tanaka convenciera a los oficiales rebeldes de que se fueran a su casa. Tanaka se suicidó nueve días después.
Personal aliado celebra la rendición de Japón en París .
MacArthur en la ceremonia de rendición. Al fondo se ve la bandera ondeada por Matthew Perry .
Hatazō Adachi , comandante del 18° Ejército japonés en Nueva Guinea, rinde su espada ante el comandante de la Sexta División (Australia) , Horace Robertson .