Hatazō Adachi

A diferencia de muchos oficiales del ejército en esa época, Adachi evitó involucrarse con las facciones políticas que plagaron al Ejército Japonés en los años 1930.

Fue herido con una descarga de artillería en septiembre, la cual le causó daño permanente a su pierna derecha.

De los 140.000 hombres con los que contaba Adachi desde un principio, apenas 13.000 seguían con vida cuando terminó la guerra.

Finalmente se rindió ante la 6.ª División de Australia en Wewak, Nueva Guinea.

En una de esas cartas, dirigida a los oficiales y hombres del XVIII Ejército que en ese entonces estaban en el complejo, dijo:[3]​

El Mayor General Horace Robertson (derecha) acepta la espada del Teniente General Hatazō Adachi (izquierd) junto al Mayor Douglas Burrows MBE (centro)
Adachi en camino a rendirse.