Real Seminario de San Francisco de Asís de Popayán
[1] Desde el siglo XVII, el seminario acogió no solo a los futuros sacerdotes y evangelizadores que esparcieron la fe por la región sino que a los ricos herederos e hijos ilustres de las familias más poderosas de Popayán para ser formados con una exquisita educación.Ya entrado el siglo XVIII, el edificio sufrió bastante con el terremoto de 1736, al igual que la antigua capilla del seminario por lo que se reemplazó por la actual iglesia de San José, pero estas obras quedaron paralizadas abruptamente con la expulsión de los jesuitas en 1767 por orden del rey Carlos III de España gracias a la pragmática sanción,[2][3] por lo que el colegio cerró temporalmente hasta que los dominicos se hicieron cargo de impartir la enseñanza, posteriormente muchos de los descendientes varones de familias aristócratas se convirtieron en personas mártires y próceres fundamentales para la historia del futuro país y del continente como ejemplo están:[4] Entre otros eminentes hombres que ayudaron a formar el Colombia de hoy en día.[5] Hacia 1827, en plenos procesos de la independencia, los dominicos que regentaban el claustro fueron expulsados de la ciudad por su afinidad a la Corona Española, además se funda la Universidad del Cauca por Francisco de Paula Santander con lo que muchos de los bienes del Seminario se destinan para materializar dicha fundación.[6]Sin embargo, poco después la diócesis logra hacerse de nuevo con el edificio, reabriendo el colegio para los sacerdotes y los futuros personajes ilustres de Colombia.[1]Sin embargo, fue adquirida después por la Fundación Universitaria de Popayán a su creación en 1982 por monseñor Samuel Silverio Buitrago, al sobrevivir el edificio al fatídico terremoto del 31 de marzo de 1983, siendo posteriormente restauradas las partes afectadas del claustro, siendo actualmente su sede.