Corresponde a un área de 137,43 hectáreas cuyo eje es el estero del Rosario, el cual desemboca en la laguna del mismo nombre a orillas de la playa Las Ágatas[1][2].
La quebrada posee un microclima húmedo, influenciado tanto por sus condiciones de relieve como por la exposición que se encuentra.
Esto se debe a que su ladera sur es muy umbría, recibe el aporte hídrico del estero El Rosario (en el sector del fondo de la quebrada)y, además las neblinas nocturnas, junto con el rocío proveniente del mar, y las numerosas vertientes en las laderas de la quebrada hacen que el lugar se una zona excepcional en su entorno.
El área donde se encuentra el humedal, está emplazada sobre planicies litorales (también llamadas terrazas costeras).
Dominan las especies: Otholobium glandulosum y Myrceugenia lanceolata, con presencia de otras visualmente muy destacadas, tales como Gunnera tinctoria, Fuchsia magellanica, Blechnun chilense.
[10] Sin embargo, aún existe la posibilidad de observar en esta zona el tipo de vegetación subtropical, y hay que señalar que existen muy pocos sectores costeros con humedad alta todo el año.
Tal como es el caso del parque nacional Fray Jorge y Quebrada de Córdova, encontrándose vegetación tan antigua y que haya sobrevivido de forma relictual.
Esta legislación surgió de un proceso participativo que involucró a diversas organizaciones, investigadores, comunidades y el sector académico[19].