Posee alta capacidad de adaptación a casi todo tipo de hábitats, tanto en tierras bajas como montañosas, y desde desiertos hasta cualquier formación forestal, aunque prefiere las zonas con vegetación densa, pero también puede vivir con poca vegetación en zonas abiertas.
Sus hábitats preferidos son sierras, quebradas rocosas, y bosques densos.
Prefieren habitar en lugares silvestres; excepcionalmente se acercan a núcleos urbanos.
Ejemplares adultos, en especial los de edad avanzada, pueden llegar a tomar al ser humano como presa, especialmente niños, aunque generalmente prefieren emprender la huida ante la presencia de personas en su territorio.
[2] Tras la investigación, la 3ª edición del «Mammal Species of the World» reconoce sólo 6 subespecies.