[1] Los puentes romanos se construían con piedra y tenían el arco como estructura básica.
[4] Un estudio más completo realizado por el erudito italiano Vittorio Galliazzo encontró 931 puentes romanos, en su mayoría de piedra, en nada menos que 26 países diferentes.
Los ingenieros romanos fueron los primeros, y hasta la Revolución Industrial los únicos, en construir puentes con hormigón, que llamaron opus caementicium.
Los costes compartidos demuestran que los puentes romanos pertenecían a la región en su conjunto, y no a una sola ciudad (o dos, si estaban en la frontera).
[12][13] Los anglosajones continuaron esta práctica con bricg-geworc, una traducción literal de '"opus pontis.
Para los ríos con fuertes corrientes y para permitir los movimientos rápidos del ejército, también se empleaban habitualmente puentes de pontones.
[16] Si se tiene en cuenta la ausencia de registros de puentes sólidos premodernos que crucen ríos grandes,[17] la hazaña romana parece no tener parangón en ningún lugar del mundo hasta entrado el siglo XIX.