Puente de San Fernando

La denominación del puente se debe al santo onomástico de Fernando VI.

[3]​ Hasta el último tercio del siglo XX, el puente servía de enlace entre la M-30 y la A-6, soportando un intenso tráfico.

En el tramo derecho existían dos arcos, pero una riada de 1856 dañó el arco cercano al machón.

Una reparación posterior hizo que se reconstruyese en tres arcos, siendo el encargado el ingeniero Francisco Javier Boguerín.

Realizado enteramente en piedra de granito, se sostiene sobre seis ojos, en medio punto, que salvan la corriente.

Adoquinado del puente.