[2][3] Fundaron entre otros el poderoso reino de Buganda, que dio nombre a la actual Uganda y llegó a ser el más influyente de África Oriental entre los siglos XVIII y XIX.
[6] La evolución política, social y económica del pueblo ganda ejerció gran influencia en la historia de Uganda.
Fue la primera entre estas lenguas en ser normalizada y se estima que el 39% de los ugandeses la entienden.
[5] La mayoría habita en el país nativo, Uganda (8.419.000),[8] hay otras comunidades en territorio africano como en Tanzania (58.000)[9] y Kenia (51.000).
[18][15] Estos primeros habitantes fueron llamados por otros pueblos de la región los banansagwa, o sea “los que han sido encontrados en el lugar”.
[19] Por causas desconocidas otros clanes totémicos salieron del monte Elgon y el lago Victoria hacia las tierras de los banansagwa.
[20][21][22] No se sabe si realmente existió un hombre llamado Kintu, pero la tradición sostiene que fue el único habitante de Buganda hasta que Ggulu, o Dios, envió a su hija, Nnambi, a casarse con Kintu y poblar la región.
Buyoro se convirtió en el reino dominante de Uganda, pero Buganda mantuvo su autonomía.
[24] Los hima, pastores de rebaño pasaron a integrarse al pueblo ganda ejerciendo cierto dominio sobre el reino.
Las redes comerciales regionales en desarrollo aumentaron aún más la competencia entre Buganda y Bunyoro a fines del siglo XIX.
[25] Los primeros visitantes europeos que tuvo el pueblo ganda fueron, John Hanning Speke (1827-1864), en 1862, y Henry Morton Stanley (1841-1904), en 1875.
[30] Stanley sugirió la llegada de misioneros cristianos para mejorar las relaciones con Europa e incentivar los intercambios.
Primero se estableció una lucha por la supremacía de las nuevas religiones que intentaban sustituir a las creencias étnicas.
Luego una alternancia en el poder entre grupos cristianos y musulmanes del pueblo ganda.
Tras la llegada de las fuerzas coloniales la supremacía cristiana se consolidó, pero surgieron conflictos político-religiosos entre ingleses (protestantes) con alemanes y franceses que apoyaban a la Iglesia católica.
[33][34] En general, si un líder se volvía lo suficientemente poderoso, asumiría el título de jefe o rey.
Llegado a esa dignidad, la sociedad asumía la forma organizativa de un reino con un monarca.
[36] Debido a que los ganda no practicaba la primogenitura, un consejero sénior mayor seleccionaba al nuevo rey de entre los hombres cuyo padre o abuelo había sido un kabaka.
Especialmente entre los siglos XVI y XVII una serie de guerras e intrigas sumieron a Buganda en la inestabilidad.
[37] Durante la época colonial se instituyó el lukiko (consejo de jefes) para fiscalizar las acciones del kabaka.
Un clan representa un grupo de personas que pueden rastrear su linaje hasta un ancestro común en el pasado.
También utilizaron canoas para desplazarse por el lago Victoria, lo que les ayudó a defender su territorio contra los invasores terrestres y agregó otra línea de comunicación interna.
[41] El pueblo ganda apreciaba la música y fabricó una amplia variedad de instrumentos.
[42] Se menciona una fiesta nacional donde el kubaka realzaba su figura con ropajes vistosos y ocupando un sitial central en la misma.
Tras el fallecimiento se cumplían rituales y las aldeas estaban de luto, limitando o paralizando sus actividades.
[44] La mayoría de las grandes explotaciones agrícolas del pueblo ganda estaba destinada a bananos y plátanos.
[47] La religión nativa consistía principalmente en el culto a los antepasados, la creencia en un ser supremo, así como en un grupo de espíritus y deidades cuyos rituales dirigían especialistas religiosos.
Misambwa: anidan en la naturaleza (ríos, árboles, rocas, etc.) y se relacionan con clanes o regiones geográficas.
Mutesa evitó la conversión, eligiendo en cambio enfrentar a los tres bandos entre sí para obtener armas y otros recursos que necesitaba para expandir las fronteras de Buganda.
[30] La presencia islámica quedó materializada en la construcción de mezquitas y al introducción del kanzu o túnica suajili.