Proposición
En filosofía y lógica, el término proposición se usa para referirse a:[1] Intuitivamente una proposición expresa un contenido semántico a la que, bajo cierto procedimiento acordado o prescrito, es posible asignarle un valor de verdad (usualmente «verdadero» o «falso», aunque en lógica formal se admiten otros valores de verdad diferentes).En ese sentido una proposición puede entenderse como un producto lógico del pensamiento humano que es expresado mediante una lengua natural, aunque también existen lenguajes formales (como la notación matemática).Una proposición expresada en lenguaje natural deberá ser una oración gramatical o como mínimo una oración semánticamente no vacía, mientras que una proposición expresada en un lenguaje formal deberá ser una cadena de signos que constituya una fórmula bien formada.Por eso el juicio es una afirmación categórica, es decir, incondicionada porque representa adecuadamente la realidad.En lógica formal se identifica una proposición lógica con una fórmula bien formada usando los símbolos del alfabeto que caracteriza al lenguaje formal que se esté empleando.Aunque existen lógicas polivalentes, en orden a la claridad del concepto, aquí consideramos únicamente el valor de verdad o falsedad.La condición de ser susceptible de ser verdadero o falso requiere además algunas propiedades formales: Según su estructura o complejidad interna las proposiciones pueden clasificarse en: Debe notarse que proposición se refiere a contenidos semánticos (a la relación entre una expresión lingüística y un hecho del mundo real), mientras que el término enunciado se refiere a un hecho pragmático usualmente realizado a través de una actuación lingüística como es una oración.Así por ejemplo, «Llueve» es un oración, al igual que «It rains» y ambas oraciones expresan la misma proposición lógica por cuanto ambos representan siempre el mismo valor.[6] Apreciar, percibir que llueve como acto interno del individuo fundamenta la creencia, con independencia de su expresión lingüística.Eso explica por qué puede establecer sus leyes y reglas de modo simbólico, construyendo diversos cálculos que puedan modelizar algunos contextos lingüísticos o teorías científicas, de forma semejante a las matemáticas.Su elemento fundamental es la proposición lógica y la definición de las reglas que, tomadas como leyes lógicas, permiten la transformación de unas expresiones bien formadas (EBF)s en otras equivalentes, como inferencias.Así el enunciado «llueve» es verdadero si y sólo si está lloviendo en ese momento.Pero si dicho enunciado se considera como proposición lógica atómica, p, entonces puede ser tanto verdadera como falsa.Las tautologías se constituyen como «leyes lógicas» o «verdades formales» y son la base sobre la que se construyen las reglas de inferencia en el razonamiento o cálculo lógico.Este tipo de análisis está claramente en desuso, pues introduce el verbo «ser» como referencia a la realidad que, por definición, es un elemento extralógico.[9] Por eso Aristóteles consideraba la validez formal de sus argumentos como silogismo categórico.La clase tiene su sentido aun cuando no existan individuos que pertenezcan a ella; pero los individuos que pertenecen a ella están de esta manera clasificados.En matemáticas las clases se consideran como conjuntos y los individuos son considerados como elementos: ”Maximiliano corre” es ahora analizado como Fx en que el argumento x es reemplazado por Maximiliano y F como predicado reemplaza a correr.Los cálculos pueden ser eternamente infinitos según consideremos las proposiciones y definamos las reglas.El llamado cálculo de deducción natural, es el más fácilmente ligado a la expresión lingüística habitual.El predicado de una proposición negativa está tomado en su extensión universal, se refiere a todos.La lógica matemática estudia los sistemas formales, formados por conjuntos de signos y reglas combinatorias definidas axiomáticas, que son interpretables semánticamente.En lógica matemática, la noción fundamental es la de lenguaje formal, un lenguaje formal viene definido por tres elementos: Una cuestión planteada a propósito de las proposiciones es: Tradicionalmente en filosofía, se ha considerado que la verdad lógica es independiente del lenguaje empleado para definirla y, por tanto, ha considerado, que la proposición representa la estructura lingüística como algo independiente de los enunciados: Los que consideran que la verdad únicamente es aplicable al mundo y a los enunciados directamente, sin tener que llegar a la fusión de la lógica con el lenguaje, consideran la proposición como un artilugio conceptual inútil: Ciertamente la verdad lógica se ha de mantener, como verdad, a través de todas las sustituciones léxicas, y no depende de los rasgos del mundo que se expresan mediante el léxico.