En esta clase de juguetes ópticos, la mirada y la manipulación del objeto son aspectos cruciales.
La mirada del espectador será inmóvil ya que observará cómo delante de él suceden estos hechos.
Los espejos son superficies planas y pavimentadas donde se produce el fenómeno de la reflexión.
Casi al mismo tiempo, Simon Stampfer inventó el stroboscopio, que solo se diferenciaba del fenaquistoscopio por la separación de las grietas y por los dibujos hechos por dos discos diferentes rodados en sentidos contrarios.
Las grietas de este estaban en la parte superior del cilindro negro y los dibujos eran llevados por una cinta inamovible colocada en su interior.