Popol Vuh

Popol Vuh (del quiché: Popol Wuj ‘Libro del consejo’) es el nombre de una recopilación bilingüe de narraciones míticas, legendarias e históricas del pueblo maya k'iche' o quiché, el pueblo indígena en la actual Guatemala con mayor cantidad de población.

El texto del Popol Vuh se conserva en un manuscrito bilingüe redactado por fray Francisco Ximénez, quien se identifica como el transcriptor (de la versión en maya quiché) y traductor de un «libro» antiguo.

Sin embargo, este hipotético autor «nunca revela la fuente de su obra escrita y en su lugar invita al lector a creer lo que quiera del primer folio recto»,[2]​ donde afirma que el libro original "ya no se ve más" y utiliza la expresión "pintado" para describirlo.

Si existiera tal documento, habría permanecido oculto hasta el período 1701-1703, cuando Ximénez llegó a ser cura doctrinero de Santo Tomás Chichicastenango (Chuilá).

En 1861 publicó un volumen bajo el título Popol Vuh, le livre sacré et les mythes de l'antiquité américaine.

[4]​ Los primeros investigadores supusieron que el Popol Vuh había sido escrito en lengua maya con caracteres latinos, recogiendo de este modo la tradición oral existente en los siglos XVI y XVII.

La mención en las genealogías de personajes del periodo posterior a la conquista indican sin duda que la obra tal como existe actualmente es también posterior a la presencia hispánica en el área.

Mi apreciación se basa en el minucioso análisis comparativo que he realizado de las primeras 1,180 líneas del Popol Vuh con las dos versiones españolas de fray Francisco.

Pero mi intención no está dirigida a desacreditar la competencia lingüística de este religioso, sino a poner de manifiesto que, con el escaso conocimiento de la lengua k'iche' que poseía, resulta natural que haya desfigurado la obra al copiarla».

En este mismo orden de ideas, John Woodruff, otro crítico, ha llegado a la conclusión de que «no está suficientemente establecida la medida de la interacción que Ximénez tiene con el texto [...] y sin discutir lo que pudiera constituir un discurso indígena auténtico, por lo menos se pueden identificar algunas de las ideas contenidas en el primer folio recto como no totalmente indígenas».

[9]​ La escultura data aproximadamente del año 200 a. C. y muestra a los míticos héroes gemelos Hunahpú e Ixbalanqué, nadando en el averno para recuperar la cabeza decapitada de su padre.

La escultura data del mismo período que algunos de los trabajos más antiguos relacionados con el Popol Vuh: los murales en San Bartolo y la estela de Nakbe, dos ciudades cercanas.

Los arqueólogos instalaron un cobertizo de clima controlado sobre el área recién descubierta para evitar que la estructura se dañara.

[9]​ El Popol Vuh abarca una variedad de temas que incluye la creación, ascendencia, historia y cosmología.

Como la versión del abate francés es la más conocida, esto facilitará el trabajo de aquellos lectores que deseen hacer un estudio comparativo de las distintas traducciones del Popol Vuh».

La intención era que sus propias creaciones le pudieran hablar y agradecer por la vida.

Primero se creó la Tierra, después los animales y finalmente, los hombres.

Entonces se manifestó con claridad, mientras meditaban, que cuando amaneciera debía aparecer el hombre.

No habrá gloria ni grandeza en nuestra creación y formación hasta que exista la criatura humana, el hombre formado.

Así fue en verdad como se hizo la creación de la tierra: -¡Tierra!, dijeron, y al instante fue hecha.

Así les fue dicho a los venados, los pájaros, leones, tigres y serpientes.

Pero no se pudo conseguir que hablaran como los hombres; sólo chillaban, cacareaban y graznaban; no se manifestó la forma de su lenguaje, y cada uno gritaba de manera diferente.

Todavía hay quienes nos adoren, haremos otros seres que sean obedientes.

Así dijeron cuando hicieron saber su voluntad a los animales pequeños y grandes que hay sobre la faz de la tierra.

-¡Anda a botarlos afuera!, dijo la vieja, porque verdaderamente es mucho lo que gritan.

Sin embargo, no demostraban su sabiduría, por la envidia que les tenían, pues sus corazones estaban llenos de mala voluntad para ellos, sin que Hunahpú e lxbalanqué los hubieran ofendido en nada.

Panel mostrando a los héroes gemelos Hunahpú e Ixbalanqué descubierto en El Mirador en 2009. [ 9 ]