Sus grabaciones solían circular en casetes o blogs, y se caracterizaban especialmente por el uso de equipamiento analógico anticuado y la experimentación del «hágalo usted mismo».[3] El término se empezó a usar indistintamente de «chillwave» o «glo-fi», y ganó atención crítica por medio de artistas como Ariel Pink y James Ferraro.Inspirado por comentarios de los artistas James Ferraro y Spencer Clark, así como rememorando un concepto similar planteado por el esoterista ruso Peter Demianovich Ouspensky, Keenan empleó el término «hipnagógico» refiriéndose al estado psicológico «entre dormido y despierto» donde se producen alucinaciones auditivas, visuales o táctiles y «contribuyen a la formación de los sueños».[14] En una reseña contemporánea del álbum debut de la banda Neon Indian, Psychic Chasms (2009), el periodista Marc Hogan nombró al «dream-beat», «chillwave», «glo-fi», «hypnagogic pop», y «hipster-gogic pop» como términos intercambiables para la «música psicodélica que cumple con una o todas de las características siguientes: basada en sintetizadores, [con] sonido casero, referenciada en los años 80, orientada al casete, calentada por el sol, relajada, alabeada, difusa, emocionalmente distante, [y] ligeramente desenfocada».Que pese a compartir el sufijo «-wave» —en español: onda u ola—, solo está vagamente conectado al chillwave.
El término «
hypnagogic
pop» fue inspirado por unos comentarios hechos por
James Ferraro
(en la foto [año 2012]) y Spencer Clark
[
10
]