Taquillazo

Un éxito de taquilla o éxito de ventas,[1]​ también conocido por las formas coloquiales taquillazo o bombazo (o por el anglicismo blockbuster) son expresiones y términos que se aplican en el mundo del espectáculo y el ocio a películas, obras de teatro, funciones circenses, videojuegos, etc, que denotan popularidad o son exitosos en su sector,[2]​ normalmente con una producción que conlleva a personas muy bellas como protagonistas, un gran presupuesto y que logran los mejores resultados en taquilla en un tiempo récord.

Por tanto, un taquillazo sería una pieza que llevaría todos los otros teatros del vecindario a la quiebra.

Hollywood responde a este problema con espectáculos más increíbles, una estética más espectacular, utilizando las nuevas tecnologías de la época para ofrecer lo que entonces no tenía la televisión: una gran pantalla y color.

Es una manera de indicar a qué escala se estima el coste del film.

[8]​ En cinematografía, se llama «taquillazo» a la producción hecha para llevar a las salas a gran parte de la población mundial, se le puede llamar también cine de palomitas o "cine palomitero", pero quizá este concepto no abarque películas comerciales que no tengan un gran presupuesto ni que se gasten millones en publicidad.

Por eso un taquillazo suele ser una superproducción con una o más estrellas en el reparto y grandes efectos especiales.

[9]​ En relación con los videojuegos, los bombazos son la continuación o extensión de los videojuegos, por ejemplo Call of Duty: Modern Warfare 2 no es otro que la continuación de Call of Duty 4: Modern Warfare.

Se considera que los blockbusters deben ser un éxito total y en consecuencia alcanzar un máximo de beneficios.

El primer taquillazo cinematográfico normalmente admitido como género cinematográfico es Tiburón de Steven Spielberg .
El Padrino de Francis Ford Coppola marca un giro en 1972 revolucionando la distribución de las películas.