Es un plato típico de la cultura culinaria jienense que se suele preparar colectivamente en el campo, servir caliente y decorado con pimientos morrones.
Al iniciar su preparación los asistentes se dan cuenta de la falta del arroz.
Se inicia la preparación y mientras el secretario regresa al municipio para volver con el ingrediente olvidado.
Se sofríen los ingredientes de hortalizas (generalmente pimientos, cebollas y ajos).
Los productos del sofrito se suelen majar hasta conseguir una textura similar a la de un salmorejo.