Puesto al mando del crucero auxiliar Mar Cantábrico, intervino en el bloqueo del Mediterráneo hasta 1938, obteniendo la Medalla Militar Individual, máxima condecoración después de la cruz Laureada de San Fernando.
La flota efencuó bombardeos de costa y apoyó a las unidades terrestres sitiadas por el enemigo.
Apenas nombrado ministro en 1962, Nieto Antúnez presentó un programa naval que se podría calificar cuanto menos de ambicioso.
Dicho programa incluía la construcción de unos 150 buques: 2 portaaviones, 2 cruceros lanzamisiles, 8 destructores, 12 fragatas oceánicas, 28 fragatas ligeras, 8 submarinos, más decenas de dragaminas, buques auxiliares y transportes.
La cosa no le salió del todo mal al almirante y, en 1963, resultó aprobado un “mini-plan” mucho más sensato que comprendía la adquisición de un crucero ligero y 5 fragatas similares a la clase Leander británica.
En 1973, al ser asesinado Carrero Blanco, su nombre apareció como candidato a sucederle.
Sin embargo, el general Franco escogió finalmente a Carlos Arias Navarro para que fuera el nuevo presidente del Gobierno.