[2] Parramos fue completamente destruido por el terremoto del 3 de septiembre de 1874[3] y tuvo que ser trasladado a una nueva ubicación en «Panaj», en cuyo terreno se concedieron pequeños lotes a los vecinos.
[3] No solamente se destruyó completamente el pueblo de Parramos,[4] [9] sino que bandas de forajidos armados con cuchillos y otras armas punzocortantes intentaron asaltar a los damnificados y robarles lo poco que les quedaba; afortunadamente, las bandas fueron capturadas por la policía del gobierno del general Justo Rufino Barrios y ejecutadas sumariamente.
[3] Los sismos se iniciaron en agosto, pero nadie les puso atención pues la población estaba acostumbrada a que temblara con cierta frecuencia; es más, no impidieron que se celebrara una gran gala en honor al enlace matrimonial del presidente Barrios con su joven esposa, Francisca Aparicio de Barrios.
[3] Otro testigo indicó que el pueblo de San Miguel Dueñas quedó totalmente destruido, y quienes lograron sobrevivir salieron huyendo buscando áreas más seguras.
[3] Como el poblado de Parramos quedó completamente destruido por el terremoto, el gobierno de Barrios ordenó que se trasladara al lugar denominado «Panaj», en cuyo terreno se concedieron pequeños lotes a los vecinos, proceso que estuvo a cargo del coronel José Nájera, quien entonces desempeñaba la Jefatura política de Chimaltenango.