[3] A su vez, posee un acuario en argamasa y un estanque conocido como Lago de los Patos.En 1913, César de Sá Rabello se los compra, pero en 1920 Henrique Lage recupera la propiedad familiar.[5] En la década de 1920, Lage contrata al arquitecto italiano Mario Vodret para que remodele el palacio.En esta época, Gabriela Bezanzoni organizaba magníficas fiestas en que figuraban los más prominentes representantes de la sociedad carioca.Entregó parte de sus bienes al banco como pago y, la otra, vendió para empresarios particulares.