La medicina egipcia temprana estaba basada mayoritariamente en una mezcla de hechizos mágicos y religiosos.
Las instrucciones para estos rituales médicos fueron posteriormente inscritas en rollos de papiro por los sacerdotes que los practicaban.
[1] Datado en c. 1800 a. C., el papiro ginecológico Kahun es el texto médico conocido más antiguo de Egipto.
[2] El papiro contiene 35 párrafos separados relativos a la salud de las mujeres: enfermedades ginecológicas, fertilidad, embarazo y contracepción.
El papiro toma su nombre del arqueólogo egipcio Edwin Smith, que lo adquirió alrededor de 1860.
Se analizan 48 casos de trauma, cada cual con una descripción del examen físico, diagnosis, tratamiento, y pronóstico.
El papiro abarca muchos temas diferentes, incluyendo dermatología, enfermedades digestivas, lesiones traumáticas, odontología y ginecología.
Se centra en tratamientos para los problemas que afectan al sistema urinario, a la sangre, cabello y picaduras.
A pesar de sus precarias condiciones, su estudio ha mostrado que reunía principalmente conjuros mágicos como remedio para las enfermedades.