Palanteo (latín: Pallantium, griego antiguo: Παλλάντιον) es el nombre de una ciudad legendaria ubicada sobre el Monte Palatino, en las proximidades del río Tíber, donde más tarde se alzaría la ciudad de Roma.
[4][5][6] Pausanias agrega, incluso, que la Pallantion árcade estaba al noreste de Megalópolis, no lejos de Tegea (en el Peloponeso) y que Antonino Pio le concedió el rango de “ciudad libre”.
Este joven marcha con sus compatriotas en auxilio de los troyanos sitiados en su campamento y muere a manos del mismo Turno, quien lo despoja.
La vista de tales despojos, en el último libro del poema, hace que Eneas no acceda a las súplicas del vencido rey, y lo mate.
[7] La leyenda de Palanteo fue importante para la formación de la mitología romana, pues brindaba un vínculo directo con los héroes griegos, caracterizándola como una verdadera polis desde su origen.