Palacio municipal de Villena

Fue enajenado en 1576 por el cabildo eclesiástico, y adquirida por el concejo de la ciudad para casas consistoriales.Su construcción se atribuye a Jacobo Florentino, escultor que había trabajado con Miguel Ángel en Florencia y que, tras obrar en Granada, y Murcia, muere en Villena en 1526.La portada, blasonada con el escudo de la ciudad mantenido por tenantes y enmarcado por una orla de temas zoomorfos y florales, sigue el esquema serliano de orden dórico con pedestales y frontón triangular.En el interior del edificio destaca el patio con arcos carpaneles sobre columnas toscanas, discos en las enjutas y casetones en el intradós.En 1707 el arquitecto Cosme Carreras intervino en el edificio dejando la impronta barroca en la ventana de la fachada del frente izquierdo.
Patio columnado