Se trata de un ordinariato militar latino, inmediatamente sujeto a la Santa Sede.
El ordinariato militar tiene jurisdicción personal peculiar ordinaria y propia sobre los fieles católicos militares de rito latino, incluso si se hallan fuera de las fronteras del país, pero los fieles continúan siendo feligreses también de la diócesis y parroquia de la que forman parte por razón del domicilio o del rito, pues la jurisdicción es cumulativa con el obispo del lugar.
La sede del ordinariato militar se encuentra en la ciudad de Nairobi.
[2] Cada ordinariato militar se rige por un estatuto propio emanado de la Santa Sede y tiene a su frente un obispo ordinario nombrado por el papa teniendo en cuenta los acuerdos con los diversos Estados.
Según el Anuario Pontificio 2020 el ordinariato militar en 2019 tenía 27 sacerdotes y 3 religiosos.