[6] El Datsun Fairlady ya había cosechado mucho éxito durante años, que por su precio económico y fiabilidad competía contra los roadsters ingleses e italianos, pero la popularidad de los GT dejaba obsoleto a los pequeños deportivos ligeros.
En 1971 se comienza a ofrecer la transmisión automática, pero solamente 10% de los clientes ordenaron esta opción.
Por otro lado, los rines de magnesio reducían su peso, al mismo tiempo que le aportaban un toque estilístico.
[6] Su motor producía 151 CV (149 HP; 111 kW) y se adapta a las nuevas reglas anticontaminación establecidas en los Estados Unidos al ser desarrollado en plena crisis del petróleo de 1973.
También vio la adición de unos parachoques obligatorios reforzados que aumentó el peso a 1170 kg (2579 libras).
Lo más destacable fue el nuevo modelo de una carrocería 2+2 que estiró la distancia entre ejes en 30 cm (11,8 pulgadas).
La "E" significa inyección electrónica de combustible multipunto, proporcionada por Bosch usando el sistema L-Jetronic.
El resto del coche cambió por completo, buscando un giro hacia un segmento más lujoso y menos purista, ya que el mercado presentaba esa tendencia.
Además de un diseño modernizado y menos clásico, los cambios introdujeron nuevas opciones con versiones "2+2", además del tradicional biplaza, nuevas transmisiones automáticas de tres velocidades, una variante con turbocompresor y un doble techo-T fijo desmontable.
Tal vez había perdido algo de su esencia, pero con la potencia incrementada hasta 180 CV (178 HP; 132 kW) y 28 kg·m (275 N·m; 203 lb·pie), lo llevaron a colocar 86 007 unidades en el mercado en su primer año, dando resultado dicho giro.
En 1980 aparece el techo “T Top” removible, que equiparía a casi la mitad de los coches vendidos.
[12] Tras siete años cosechando un gran éxito en el mercado con 329 900 unidades puestas en circulación en todo el mundo, en 1990 llegó el momento de actualizar al 300ZX para darle una nueva imagen que enamoraría a propios y extraños, gracias a unas líneas todavía más acertadas, una cintura muy baja y un comportamiento dinámico espectacular: el Z32.
[12] Por primera vez en 20 años se decide rediseñar desde cero la imagen del modelo Z, manteniendo viva la carrocería con configuración de tres puertas.
Las líneas se suavizan y todos los componentes de plástico en los parachoques desaparecen para dar paso a piezas de color carrocería, un elegante alerón trasero, un perfil más ancho y un coeficiente aerodinámico que, sorprendentemente pasaba a 0.31 desde los 0.30 del Z31 anterior.
Las suspensiones eran independientes con arreglo multilink en las cuatro esquinas y el diferencial de deslizamiento limitado era viscoso.
El sistema Súper HICAS, el cual fue accionado hidráulicamente hasta 1994 y, posteriormente, mediante un actuador eléctrico, le daba dirección parcial en el eje trasero.
Llegó desde Japón hasta cierto punto rápido, pero cuando los tuners le pusieron las manos encima, se volvió uno de los coches más populares para ser modificado.
[13] Algunos de sus rivales eran el Alfa Romeo Brera, el Audi TT, el BMW Z4, el Mazda RX-8, el Honda S2000 y el Mercedes-Benz Clase SLK.
Inicialmente, la única planta motriz disponible era un V6 con distribución de doble (DOHC) árbol de levas y cuatro válvulas por cilindro, denominado VQ35DE que lo compartía con los Altima, Maxima, la minivan Quest y el Infiniti G35; aunque con varias modificaciones para darle una sensación más deportiva.
Con esta modificación, la aceleración de 0 a 100 km/h (62 mph) se conseguía en 5.7 segundos, dos décimas menos que antes.
El vehículo cuenta con un cofre largo, como es común en los Fairlady Z y una luneta trasera estilo Fastback.
Tiene un óptimo balance entre peso y rigidez que permite manejar con confianza bajo cualquier condición.
Es el primer modelo Z en no contar con la designación numérica iniciada por Yukata Katayama, con el Datsun 240Z de la primera generación.
Estéticamente, recupera en gran medida el diseño del modelo de preserie, por lo que solamente cambian algunos detalles.
Lo demás es igual al prototipo inicial y se mantiene el diseño "retro" inspirado en el Datsun 240Z original.
Compitió en el Campeonato Internacional de Marcas y también se destacó en las competencias internacionales, ya que en 1971 logra los dos primeros puestos en el “East African Safari Rally” de Kenia-Uganda o el Southern Cross australiano, con un fuerte equipo: el alemán Edgard Herrmann y el finlandés Rauno Aaltonen.