[2][3] Al igual que las neuronas motoras alfa, sus cuerpos celulares están ubicados en la columna gris anterior de la médula espinal.Sin embargo, su papel es importante para mantener tensos los husos musculares, permitiendo así la activación continua de las neuronas alfa, lo que conduce a la contracción muscular.Las neuronas motoras gamma (γ), por otro lado, inervan sólo las fibras musculares intrafusales (dentro del huso muscular),[9] donde contactan los receptores neuromusculares de Kühne.[10] Por su parte, las neuronas motoras beta (β), que están presentes en cantidades muy bajas, inervan tanto las células musculares intrafusales como las extrafusales.[12] Este proceso mantiene la tensión de los husos musculares y se denomina coactivación alfa-gamma (α-γ).[16] Los husos están inervados por fibras sensoriales del tipo Ia, las cuales establecen sinapsis con las neuronas motoras alfa en el cuerno anterior de la médula, completando así el circuito gamma.Esta tracción en paralelo asegura que los husos musculares se mantengan tensos y sean capaces de detectar con facilidad variaciones sutiles en el estiramiento.Por lo tanto, este tipo de neurona motora gamma se puede utilizar para actividades que requieren cambios rápidos en la longitud del músculo para adaptarse, como mantener el equilibrio sobre una barandilla.Se originan en la placa basal, que es la porción ventral del tubo neural en el embrión en desarrollo.Las neuronas motoras gamma (γ), como todas las células, expresan marcadores genéticos específicos al nacer.Los factores neurotróficos GDNF derivados del huso muscular también deben estar presentes para la supervivencia postnatal.Por otra parte, la proteína de unión al ADN neuronal NeuN, está presente en cantidades significativamente mayores en las neuronas motoras alfa.Además, las neuronas motoras gamma (γ) desempeñan un papel importante al influir en las fibras musculares intrafusales.El tono muscular también se debe a la descarga tónica de las neuronas motoras gamma (γ).Por lo tanto, las neuronas sensoriales que retroalimentan al cerebro y a la médula espinal son engañosas.Por ejemplo, si un paciente tiene neuronas motoras gamma hiperactivas, habrá una resistencia al movimiento pasivo causando rigidez, también llamada espasticidad.Esto se encuentra a menudo en individuos con daños en los centros superiores que afectan las vías descendentes.[20] Las neuronas motoras gamma ayudan a mantener tenso el huso muscular, ajustando así la sensibilidad.Por lo tanto, si no se produce una activación adecuada de las neuronas motoras gamma, el movimiento muscular puede verse afectado negativamente.En entornos clínicos, es posible comprobar si alguien tiene una ganancia gamma anormalmente baja o alta simplemente moviendo el brazo del paciente.La ganancia gamma es el proceso mediante el cual la aceleración, la velocidad y la longitud de los cambios musculares se incrementan de manera uniforme, lo que permite que se produzcan movimientos más precisos en la situación adecuada.Si es más difícil doblar el brazo de un paciente a la altura del codo hacia adelante y hacia atrás, entonces tendrá una mayor ganancia gamma, mientras que alguien cuyo brazo se mueve con mucha facilidad tendrá una menor ganancia gamma.