Se asienta sobre un pronunciado meandro del río Lozoya, configurado a modo de península.Este enclave configura dos tramos bien diferenciados: en los citados lados, contiguos al río, la muralla está conformada únicamente por un adarve bajo, mientras que en los restantes flancos, la construcción es mucho más sólida y consistente, ante la ausencia de una defensa natural.Esta parte consta de un adarve alto, alrededor del cual se articulan doce torres adosadas, una torre albarrana, una barbacana, un foso, un castillo y una coracha, entre otros elementos característicos de la arquitectura militar medieval.La protección ofrecida por el cauce del río Lozoya hizo innecesario edificar en la cara norte, nordeste y noroeste torreones o cubos, que sí están presentes hacia el sur.Los lados sur y sureste (los más alejados del río) cuentan con numerosos elementos defensivos, entre los que cabe destacar los siguientes: