La superficie interior del cilindro se encuentra normalmente recubierta con un material resistente a la abrasión como por ejemplo acero de manganeso o goma, aunque presentan menores desgastes los forrados en goma.
Hay referencias de que fue utilizado para moler sílex destinado a hacer cerámica hacia 1870.
[1] El molino para desarrollar su giro requiere de un motor eléctrico para transmitir el torque necesario para el movimiento, o en los equipos más modernos el mismo molino se convierte en el rotor siendo inducido por electro imanes montados en campos alrededor del cilindro.
Mientras el cilindro gira, las bolas son arrastradas hacia arriba por el lateral del cilindro que asciende al girar hasta que luego caen por acción de la fuerza de gravedad.
[4] Además, se tiene constancia que este tipo de molienda ayuda a la efectividad para producir materiales amorfos.
Los molinos de bolas industriales pueden operar en forma continua, alimentándolos por un extremo y vaciándolos por el otro.
Los molinos de bolas grandes a medianos son hechos rotar por medios mecánicos sobre su eje, mientras que los pequeños normalmente consisten de un contenedor cilíndrico con tapa que se encuentra sobre dos ejes impulsores (Se utilizan poleas y cintas para transmitir el movimiento rotativo).
Un molino de bolas planetario posee como mínimo un cilindro de molienda que se encuentra ubicado en forma excéntrica en una rueda llamada rueda del sol.