), ocasionalmente escrito moé, es una palabra del argot japonés que originalmente se refiere a un fetiche por los personajes de videojuegos, anime o manga.
Los rasgos moe más comunes suelen ser aquellos relacionados con la ternura como lo son algunos rasgos físicos (edad), rasgos emocionales (ingenuidad o inocencia), una peculiar conducta sumado a alguna debilidad obvia que atraiga la simpatía y cariño del fanático, siendo esto algo que no es falso, pero en realidad su objetivo también se podría decir como ya se mencionó, despertar o resaltar un fetiche o atracción sexual hacia estos personajes.
Moe (萌え, pronunciado como [mo.e]) es una palabra de jerga en el lenguaje japonés, un préstamo lingüístico que hace referencia a un fuerte afecto o cariño (fetiche), principalmente hacia personajes ficticios del anime, manga y videojuegos.
Algunos de los teorizadores más importantes sobre este fenómeno cultural son: Tamaki Saitō, Hiroki Azuma y Kazuya Tsurumaki, los cuales dan su propia definición sobre el “moe”, su significado y su importancia en el ámbito japonés de la subcultura “otaku”.
El término "Moe" se utiliza en el argot para referirse a los sentimientos de cariño, adoración, devoción y hasta excitación sexual que se personifican en los personajes, valga la redundancia, ya sea de manga, anime o videojuegos, que ayudan a resaltar sus características y su propia personalidad.
La palabra además se utiliza también para ser relacionada en otra cantidad de temas (novelas ligeras, live action, doramas, ilustraciones, personajes literarios, etc.).
El común denominador en todos los sentimientos que engloba el término “moe” es que esa fijación emocional se tiene con objetos con los cuales no se puede entablar una relación sentimental real, ya sea con personajes de ficción, idols u objetos inorgánicos (dakimakuras, figmas, pósteres, artículos de moda como lentes, etc.).
Esto puede ser considerado algún tipo de “pseudo-romance”, pero no siempre se puede percibir como un “romance real”.
Frecuentemente las chicas estilo moekko aparecen junto con una oneesama (hermana mayor) en relaciones que denotan un lazo constante y caprichoso.
Además, muchas series de anime tienen personajes y temas que son notablemente similares al shōjo, aunque las series estilo moe en principio están dirigidas directamente a un público masculino adulto debido a que están en horario para adultos en la televisión.
A veces esto es explicado como tener un 'complejo de Gran Hermano' (al que irónicamente algunos encuentran connotaciones sexuales).
Aquellos detractores del género al respecto afirman que los fanáticos del moe tienden a rebuscar personajes que son no-amenazantes y lindas, o ellos adoptan una interpretación errada de algunos personajes femeninos en la forma de un ídolo auto-creado.
Otra razón por la cual el término puede tener su origen en Hotaru Tomoe puede ser su trasfondo en la historia del anime.
Desde entonces, la industria del anime ha producido muchos personajes que comparten sus atributos de piel pálida, cabello azul y su "personalidad calmada".
En 2009, el editor en jefe del sitio web Japanator, Brad Rice, dijo que: “el moe se ha convertido en una fuerza económica, literalmente”, refiriéndose a que muchos productos utilizan algún elemento o característica del “moe” para poder venderse mejor.
[4] En muchas ocasiones, los sentimientos por personajes moe ficticios puede incluir alguna “fijación sexual” o puede entenderse en el contexto donde “aparecen un montón de chicas lindas con pechos grandes”.
Los Premios a Videojuegos Moe (The Moe Game Awards, en idioma inglés) se otorgan anualmente a los videojuegos bishōjo que se han publicado durante el año en varias categorías, en las que destacan música de fondo, diseño de personajes, desarrollo gráfico, fandisc y contenido erótico.
Por otra parte, el crítico Hiroki Azuma rechaza los argumentos de Saito por considerarlos "demasiado complejos".
Toshio Okada dice que, aunque él mismo no logra entender por completo el término “moe”, define que no consiste simplemente en ser estimulado emocionalmente por chicas lindas, sino también se puede utilizar como una meta-visión de verse a sí mismo caer en semejante estado.
Las aplicaciones de esta definición se han extendido al terreno político, económico y en discusiones culturales.
Hayao Miyazaki se opone completamente al carácter sumiso que suele acompañar a estos personajes.