El Milion (en griego: Μίλ(λ)ιον), es un miliario erigido a principios del siglo IV d. C. en Constantinopla.
[1] El nuevo edificio cumplía la misma función que el Milliarium aureum de Roma: se consideraba el origen de todos los caminos que conducían a las ciudades europeas del Imperio bizantino, y en su base estaban inscritas las distancias de las principales ciudades del Imperio desde Constantinopla.
El monumento se encontraba justo al oeste del Augustaeum, y era mucho más complejo que su homólogo romano.
[2] Estaba coronado por las estatuas de Constantino y su madre Helena, con una cruz, mirando hacia el este, entre ellas.
[1] Durante la dinastía de los Comnenos, el Milion, debido a su posición estratégica, fue testigo de luchas en la ciudad, como las que enfrentaron a Nicéforo III y Alejo I, o las que enfrentaron a las tropas imperiales con la emperatriz María de Antioquía, que desde esta posición controlaba el Augustaeum.