Miguel Fisac

Desde sus inicios, en que va rechazando el racionalismo de sus maestros al percibir que en ellos la plástica arquitectónica no responde a las exigencias técnicas y a la necesidad humana, se vio influido por la obra del arquitecto estadounidense Frank Lloyd Wright, el neoempirismo del arquitecto Erik Gunnar Asplund y el organicismo nórdico, experimentado en su viaje en 1949 a Suecia.

Las viviendas tenían unos 40 metros cuadrados y costaban menos de 23 000 pesetas, pero aun cuando había tres instituciones políticas dedicadas a la vivienda ninguna se lo tomó en serio y el proyecto no cuajó.

Sin embargo Fisac siguió buscando soluciones prefabricadas que resolvieran el problema.

Es evidente que yo actué siempre -comenzando por mi entrada en el Opus Dei, de una forma coactiva, inadmisible.

Nuestra discrepancia fue tan grande que, durante las obras de la casa central en Roma, Mons.

Ni siquiera pude hacerlo por razones profesionales independientes del Opus Dei.

Conforme el Opus Dei crecía en extensión y poder, a mí se me iba deshaciendo como fenómeno sobrenatural.

Al final, la Obra, creció como se esperaba, ya que siempre tuvo vocación universal.

Yo no veía que podía llegar a ser el medio cristiano de salvación del mundo."

Posteriormente a su salida de esa institución religiosa, declaró que siempre se había sentido incómodo en ella, y que su salida le costó quince años de paro.

Le telefoneé, me dijo que fuera a verle esa misma tarde.

Esa "pagoda" formaba parte del programa que se me había pedido.

Parece ser que en las oficinas municipales desde el principio, y para entregar los permisos de nueva construcción, exigieron reiteradamente que se derruyera el edificio en toda su totalidad, incluida "la pagoda".

Nunca he tenido rechazo hacia los socios numerarios del Opus Dei y cada vez los quiero más.

Si la destrucción de "La Pagoda" sirve para servir a Dios y al prójimo, ¡bendita sea!"

Este talante independiente le hizo, entre otras cosas, renunciar a construir el rascacielos más alto de Europa en Benidorm.

El material del que se sirve es el hormigón pretensado en forma de piezas huecas que parecen huesos y reúnen las condiciones de una gran ligereza y resistencia.

En esta etapa se inicia en una fructífera relación experimental con el hormigón armado, material que encuentra adecuado para asumir sus analogías sobre «vigas-hueso», piezas prefabricadas que consiguen resolver el problema de salvar grandes luces, controlar la iluminación cenital y evacuar las aguas de lluvia.

Tradujo las nuevas exigencias litúrgicas emanadas del Concilio Vaticano II en la personal caligrafía de muros curvos y superficies tensadas que constituyen su principal aportación a la arquitectura religiosa.

Airado con el presente y con la profesión, afirmaba que no le gustaba ningún arquitecto español contemporáneo.

En el casco urbano de Corralejo, concretamente entre las calles Pejín y avenida Juan Carlos I, proyectó unas viviendas[6]​ para el personal del hotel que se construyeron pero no bajo su dirección, aunque conservan su impronta.

Muchas de sus soluciones en hormigón pretensado están patentadas en España, Estados Unidos y otros países.

Con estos objetivos se realizó el I Simposio Miguel Fisac, con debates y conferencias.

Iglesia de Fisac en Punta Umbría , Huelva
Edificio central del CSIC (1943, Madrid).
Iglesia del Colegio Apostólico de los Padres Dominicos (1952, Valladolid).
Claustro del Colegio Apostólico de los Padres Dominicos (1952, Valladolid).
Edificio Crédito y Caución (1968, Madrid).
Laboratorios JORBA , La Pagoda (1967, Madrid).
Instituto de Edafología y Fisiología Vegetal del CSIC (1944, Madrid).