Martillo y yunque (táctica militar)

La segunda fase involucra una fuerza más móvil que maniobra alrededor del enemigo y le ataca desde atrás o desde el flanco para así asestar un golpe decisivo.

La expresión más fuerte del concepto de martillo y yunque es aquella en que ambos niveles o escalones son suficientes por sí mismos para asestar un golpe decisivo.

El nivel o escalón del "yunque" no se refiere pues aquí a una simple táctica de distracción, sino a un cuerpo considerable que golpea al enemigo con fuerza para inmovilizarlo y pulverizar su fuerza.

[2]​ Otras variantes de este concepto permiten que un enemigo se vea retenido por una fuerza considerable de bloqueo o retención, a la vez que el nivel o escalón fuerte (el martillo), asesta el golpe decisivo.

César contrarrestó esto ubicando las reservas de su cuarta línea para que interceptaran a la caballería atacante.

César entonces dio órdenes a su tercera línea, en la que estaban sus veteranos más curtidos en la batalla, de atacar.

Los tracios y los demás auxiliares que habían quedado en el campamento pompeyano, siete cohortes en total, se defendieron con valentía, pero no pudieron repeler el asalto.

En las guerras coloniales del siglo XIX se vio a algunos ejércitos africanos desplegar tácticas de martillo y yunque.

En 1874, un poderoso ejército británico comandado por Sir Garnet Wolseley, armado con rifles y artillería modernos, invadió el territorio del Imperio asante.

Allí los británicos estarían maniatados, mientras elementos maniobrantes del ala se moverían hacia la retaguardia, atrapándolos y aislándolos.

Algunos historiadores, tales como Byron Farwell, señalan que este aproximación era una estrategia de batalla tradicional asante, común también en otros ejércitos africanos.

[17]​ En tanto el yunque mantenía en su sitio la mayor parte de la armadura alemana, esto abría el camino para que los estadounidenses empuñaran un gran "martillo" en el occidente, a la derecha de la línea aliada, rompiendo las defensas alemanas, donde los estadounidenses liderados por comandantes como Patton podían moverse libremente.

Por lo tanto, los alemanes se vieron forzados a comprometer sus escalones más fuertes en este teatro militar, las unidades móviles panzer y las de la SS para evitar tal peligro.

La amarga confrontación confinó y debilitó a la Wehrmacht, eventualmente así allanando el camino para un aplastante avance estadounidense en el occidente.

Los estadounidenses van bien y creo que ahora las cosas empezarán a avanzar hacia el plan esbozado en M512.

Pompeyo intentó usar la caballería de su flanco derecho como un golpe de martillo mientras su infantería pesada mantenía en su sitio a las legiones de César en el centro.