Nació en Sevilla, España, y realizó estudios jurídicos, alcanzando el título de licenciado.
Se desempeñó en varios puestos judiciales su ciudad natal y luego se trasladó a América, ejerciendo como inquisidor en Santo Domingo, ciudad de la cual también ejerció el cargo de alcalde mayor.
El Rey ordenó un juicio de residencia para investigar a Cortés, determinar la verdadera situación en la colonia, y el estado del gobierno interino.
Al asumir el gobierno dejó a todos los funcionarios del Ayuntamiento en sus puestos.
Cuatro días antes de morir, designó como su sucesor al licenciado Aguilar, quien asumió el mando y nombró a Diego Hernández de Proaño alguacil en general, un cargo que le daba vos y voto en las deliberaciones del Ayuntamiento, en nombre del Rey.