Marcela Iacub

Marcela Iacub (Buenos Aires, 1964) es una abogada, jurista, investigadora, pensadora y ensayista feminista argentina que posee también la nacionalidad francesa.

Vive en París con su compañero de vida el filósofo Patrice Maniglier, con quien publicó en 2003 Famille en scènes: bousculée, réinventée, toujours inattendue.

Suele realizar intervenciones populares en los medios para opinar sobre diversos temas, desde prostitución, violación, eutanasia, trasplante, matrimonio, matrimonio homosexual, maternidad, aborto, filiación, adopción homosexual o clonación hasta los métodos de procreación artificial y reproducción asistida dando siempre ejemplos jurídicos precisos.

No apoya las leyes sobre la paridad y el acoso sexual, ni la glorificación de la natalidad o la maternidad.

Para ella las categorías antropológicas más elementales con las que pensamos son jurídicas: la filiación, la sexualidad, la familia o el estado.

En cambio, si una mujer inscribe como propio un niño que no ha parido comete un grave delito penal y termina en la cárcel.

Aparece el modelo de filiación «natural» que identifica por primera vez padre con genitor.

[4]​ Utilizando la historia de las leyes, Iacub nos muestra como la filiación no tiene el carácter «natural» que le suponemos hoy en día sino que es una construcción social reciente, tanto para la paternidad como para la maternidad.

Del mismo modo que históricamente la paternidad fue consecuencia de un consentimiento del varón y no de un hecho genético, Iacub nos muestra como es algo reciente en la historia considerar madre biológica a la mujer que lleva el niño en su vientre y lo da a luz.

La maternidad es una relación social que no depende del embarazo y el parto de una manera necesaria: Hay mujeres que padecen una infertilidad que les impide llevar un bebé en su vientre y no pueden tener acceso a la reproducción asistida al estar prohibido en la mayoría de las legislaciones el alquiler de vientres (sólo quince países autorizan las madres portadoras).

[7]​ Para las parejas fértiles, en los países democráticos, existe una libertad jurídica absoluta de procreación, sin importar las circunstancias.