María de Cazalla

Su casa de Valladolid fue derribada y en el solar colocado un padrón de ignominia, porque los hereges Luteranos se juntaban en ellas a hacer conventículos contra nra Stª fe católica.

[1]​ Para esa fecha, María, tía de Agustín, ya no aparece en el proceso.

Valoraba la oración mental, no le satisfacían sacramentos como la confesión ni la comunión y criticaba los costosos ornamentos del culto.

Estando con su marido en la cama estaba más cerca de Dios que con cualquier oración del mundo.

[2]​ Al abrirse el proceso contra los alumbrados de Toledo, fue interrogada por la Inquisición en 1525 y entró en prisión en 1532.

Finalmente fue absuelta de los cargos más graves, sometida a vergüenza pública en una iglesia de Guadalajara y multada con cien ducados, prohibiéndosele mantener contacto con sus antiguas relaciones.

Auto de fe del doctor Cazalla, en Valladolid.
Palacio del Infantado , el de los Mendoza en Guadalajara.