Ha recibido reconocimientos internacionales por su trayectoria activista en defensa de los derechos sexuales y reproductivos de mujeres y jóvenes.
[1][2] Fue educada en un colegio de monjas que se utilizó como un refugio para los sacerdotes que se incorporaron a la guerrilla colombiana, militó en la juventud comunista y por su actividad política salió de Colombia.
Se le conoce como La Monja Roja por su trabajo a favor de que las mujeres decidan sobre su maternidad y su cuerpo, sin contraponer la fe católica que profesa.
[3][4] Cofundadora de la organización Católicas por el Derecho a Decidir en México y su directora por 25 años.
Durante su gestión se recibió el Premio Nacional Don Sergio Méndez Arceo, el premio de un obispo a esta organización a pesar de no contar con la simpatía de la jerarquía católica.