Misión de Apoyo contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras
[7] El gobierno hondureño colaboró activamente con la Misión y se comprometió a facilitar las instalaciones que esta requiriera para el cumplimiento de sus funciones, así como a garantizar la seguridad de todos sus miembros y su libertad de movimiento en todo el territorio nacional.Los casos a investigar eran escogidos por la MACCIH, la cual entregó informes semestrales al secretario general de la OEA, dados a conocer luego al público en general.[9] Junto a él fueron nombrados Francisco Javier Guerrero Aguirre como secretario para el fortalecimiento de la democracia y el asesor del secretario general de la OEA, Sergio Jellinek; a los cuales se sumaron otros expertos internacionales,[10][11] llegando a sumar 24 miembros durante sus primeros 6 meses de trabajo.[15] Jiménez Mayor fue sustituido de forma interina por la fiscal peruana Ana María Calderón.[29] El llamado al diálogo y la propuesta fue rechazada tajantemente por Los indignados, quienes continuaron las protestas exigiendo la conformación de la CICIH como una de las condicionantes para iniciar un diálogo.[32] El equipo mediador concluyó sus actividades el 12 del mismo mes, las cuales tuvieron como fruto la propuesta de una Misión de Apoyo y Combate a la Corrupción y la Impunidad en Honduras (MACCIH).[46] Uno de los cuestionamientos iniciales a la MACCIH fue su inhabilitación para presentar requerimientos fiscales y ejercer acciones jurídicas, como sí lo podía hacer la CICIG.[48] La UFECIC inició funciones en noviembre de 2017, con 43 profesionales seleccionados entre el Ministerio Público, la MACCIH y la Asociación para una Sociedad más Justa.[53] La MACCIH además se pronunció sobre diversos temas de interés nacional relacionados con la corrupción.[60] El recurso había sido presentado en marzo por representantes de 5 diputados acusados por corrupción,[61] generando reacciones de apoyo a la MACCIH entre sectores nacionales e internacionales.La misma petición fue hecha por Estados Unidos, la Unión Europea,[72] y organizaciones de la sociedad civil.[73] Por otra parte el Congreso Nacional de Honduras, con 71 votos a favor y 56 en contra, aprobó un informe el 9 diciembre recomendando al Poder Ejecutivo no renovarlo.[5] La OEA calificó la disolución de la MACCIH como «un hecho negativo en la lucha contra la corrupción y la impunidad en el país».[83] Almagro envió al expresidente guatemalteco Álvaro Colom para mediar el diálogo,[84] pero este fue detenido en su país por actos de corrupción.