Método Nelder-Mead

Por ejemplo, un ingeniero que diseñe un puente colgante ha de elegir el grosor de los cables laterales, los cables más largos y del soporte que irá asfaltado.

Como cada vez que se ejecuta este modelo que tiene en cuenta los factores externos se consume mucho tiempo de cálculo es importante variar los grosores con idea para no malgastar recursos.

Por otra parte, si este nuevo punto no es mucho mejor que el valor previo, entonces estamos en un valle (buscamos un mínimo, como un gran hoyo) y el algoritmo encoge el simplex hacia el mejor punto.

Existen muchas variaciones dependiendo de la naturaleza del problema que se quiera resolver.

Esta variación suele funcionar peor que el método original de Nelder-Mead descrito en el artículo pues requiere muchos pequeños pasos intermedios (subir a todas las montañas para ver cuál es la más alta).