Luis II, duque de Baviera

En agosto de 1257 Otakar invadió Baviera, pero Luis y Enrique lograron repeler el ataque.

Como uno de los príncipes-electores del imperio estaba fuertemente involucrado en las elecciones reales durante cuarenta años.

Como resultado de su apoyo a los Hohenstaufen, Luis fue prohibido por el Papa en 1266.

Su hijo mayor sobreviviente Rodolfo le sucedió, con Adolfo de Nassau convertido en su suegro unos pocos meses más tarde.

Luis fue enterrado en la iglesia de la abadía Fürstenfeld, ya que así lo había determinado en su testamento.

Como expiación Luis fundó la cisterciense abadía Fürstenfeld (Fürstenfeldbruck), cerca de Múnich.

Distintas fuentes indican diferentes relatos acerca de cómo este terrible error pudo ocurrir en primer lugar: En 1256 Luis había estado fuera de casa por un tiempo prolongado, debido a sus responsabilidades como soberano en la zona del Rin.

Los detalles sobre el contenido real de la segunda carta varían, pero de acuerdo a los cronistas el mensajero que llevaba la carta a Luis le había dado la incorrecta, y Luis llegó a la conclusión de que su esposa tenía una aventura amorosa secreta.

Luis II con sus dos primeras esposas María de Brabante (centro) y Ana de Glogau (a la derecha), del siglo XVI .