Su familia poseía la Estancia "El Paraíso" en Córdoba, en tierras que originalmente pertenecieron al fundador de la ciudad.
Allí fue donde pasaría gran parte de su infancia, después atendiendo el tradicional Colegio Montserrat.
Se interesó por la hispanidad como rector cultural en América, realizando diversos estudios al respecto en su temprana carrera.
Sus detractores de izquierda lo han intentado ligar al fascismo, corriente política que observó con simpatía en sus inicios pero no tardó en repudiar debido a los excesos cometidos por el régimen de Mussolini, incluso obteniendo enemigos dentro del mismo nacionalismo por su posición antifascista.
El mismo estuvo integrado por personalidades como Nimio de Anquín, Rodolfo Martínez Espinosa, Alberto García Vieyra, Mario Pinto, Clemente Villada Achával, José María Martínez Carreras, Ascencio Viramonte y Manuel Río.