Lampyridae

Muchas se pueden encontrar en pantanos o en las áreas húmedas y boscosas, donde sus larvas tienen una fuente de alimento abundante.

Generan luz en intervalos de seis a ocho segundos mediante un órgano especial situado bajo la cutícula (ectodérmico), localizado en la parte ventral del abdomen.

Los huevos se incuban durante tres o cuatro semanas y entonces salen de ellos las larvas, que tienen ojos simples.

[14]​ Los plaguicidas, incluidos insecticidas y herbicidas, también han sido señalados como una causa probable del declive de las luciérnagas.

[15]​[16]​ Estas sustancias químicas no sólo pueden dañar directamente a las luciérnagas, sino que también pueden reducir las poblaciones de sus presas y degradar el hábitat.

Las recomendaciones incluyen reducir o limitar la luz artificial por la noche, restaurar los hábitats donde se dan especies amenazadas y eliminar el uso innecesario de pesticidas, entre otras muchas.

[27]​ La espada japonesa llamada Hotarumaru, fabricada en el siglo XIV, recibe ese nombre por la leyenda de que una noche sus desperfectos fueron reparados por luciérnagas.

[28]​[29]​ En Italia, la luciérnaga (en italiano: lucciola) aparece en el Canto XXVI del Infierno de Dante, escrito en el siglo XIV:[30]​ Quante'l villan ch'al poggio si riposa, nel tempo che colui che'l mondo schiara a faccia sua a noi tien meno ascosa, come la mosca cede a la zanzara, vede lucciole giù per la vallea, forse colà dov' e' vendemmia e ara: di tante fiamme tutta risplendea l'ottava bolgia, ... - Infierno de Dante, Canto XXVI, líneas 25-32 Traducción aproximada en prosa: Tantas como las luciérnagas que el campesino ve en el valle [toscano] de abajo, cuando descansa en la colina —en la estación [pleno verano] en que el sol se oculta menos de nosotros, y a la hora del día [anochecer] en que la mosca da lugar al mosquito—, tal vez en los campos donde labra la tierra y recoge las uvas; con tantas llamas brillaba la octava fosa [del Infierno], ...

Luciérnagas en Georgia Estados Unidos de América, exposición de 8 segundos
La luciérnaga de Uemura Shōen de 1913, signo del verano en Japón
Hotarugari, captura de luciérnagas, de Mizuno Toshikata, 1891.