Lovelace: Garganta Profunda

En un primer momento la película refleja la vida de los protagonistas y su relación como si fuera perfecta.

A medida que avanza la película se empiezan a mostrar algunos flashbacks, donde se muestra su relación desde el otro ángulo, incluyendo escenas de violencia doméstica, abusos e intimidaciones por parte de Chuck hacia Linda.

En 1970 con apenas 20 años, Linda Lovelace (Amanda Seyfried) está viviendo con sus autoritarios padres en Davie, Florida.

Una noche que se encontraba habiendo salido a bailar con su mejor amiga Patsy (Juno Temple), ella capta la atención de Chuck Traynor (Peter Sarsgaard), y los dos desarrollan rápidamente una relación seria.

Un día durante una fiesta, Linda mira por primera vez uno de los vídeos de porno casero que Chuck tenía, y le dice que las chicas buenas como ella no hacen cosas como esas.

Desesperado por el dinero, él luego persuade a Linda para que se convierta en una actriz pornográfica y ella pronto accede y comienza a trabajar en su primera película, Deep Throat donde utilizará por primera vez su nombre artístico "Linda Lovelace".

Al día siguiente ella se encuentra secretamente con Anthony Romano (Chris Noth) y le dice que se quiere salir del negocio del porno, revelándole además, los golpes y cortes que tenía en su cara, hechas por su marido.

Un día Linda aparece en Donahue, y se ve a sus angustiados padres llorando mientras la ven en televisión.

Unos días después, Los Marchiano viajan a Florida para que Linda se reconcilie con sus padres.

[4]​ Sin embargo en noviembre se reportó que Amanda Seyfried y Peter Sarsgaard estaban en discusiones para interpretar los personajes principales.

[15]​ Además miró el film en cuestión Deep Throat[16]​ y se sometió a un entrenamiento de acento neoyorkino.

El sitio detalla que: "Amanda Seyfried y Peter Sarsgaard hacen su mejor esfuerzo con el material que tienen, pero Lovelace falta de suficiente profundidad y convicción para realmente hacerle justicia a un fascinante argumento".

[25]​ Todd McCarthy de "The Hollywood Reporter" escribió que el film estuvo "inteligentemente hecho".

Richard Roeper le dio al film una "B+", comentando que "Nunca se llega a sentir triunfante o inspiracional.

[27]​ Amanda Mae Meyncke reafirmó la performance de Seyfried como excelente pero considera que la cinta termina siendo en el global "mediocre".