El rey Alfonso X ordenó realizar entre 1276 y 1279 tres compilaciones científicas.
La obra se compone de dos partes principales: una primera, titulada de la ochava espera («de la octava esfera», que era en la que se creía por aquel entonces que se encontraban fijadas las estrellas) que describe las constelaciones del firmamento e incluye un catálogo de 1.020 estrellas con sus coordenadas celestes; y una segunda parte dedicada a la construcción y el uso de los estrumentes («instrumentos») astronómicos.
[1] La lista detallada de los libros que componen la obra son los siguientes: El monarca castellano encargó la tarea de componer el Libro del saber de astrología un equipo de hombres de diversos orígenes, religiones y profesiones, incluyendo médicos judíos, alfaquíes musulmanes y eclesiásticos castellanos e italianos.
Muchos aparecen citados por sus nombres en cada uno de los libros en que colaboraron.
[1] El papel jugado personalmente por el rey no se conoce con certeza pero el propio Libro afirma que corrigió las traducciones para pulir su lenguaje.